¿Qué balance hace a nivel macroeconómico de 2014?

La coyuntura económica en España en 2014 ha sido mucho más favorable que en ejercicios anteriores.

A nivel internacional sin embargo, el panorama ha sido heterogéneo.

La economía norteamericana ha crecido por tercer año consecutivo por encima del 2% y ha recuperado el nivel de empleo perdido durante la crisis, constituyéndose en el principal motor de la economía mundial.

La situación ha sido bien diferente en los países emergentes que, salvo excepciones positivas como la India, han afrontado un año muy convulso como consecuencia de importantes desequilibrios internos, elevados déficit fiscales, de la depreciación de sus divisas y sobre todo de la drástica caída de los precios de las materias primas. Incluso la propia China no muestra el vigor de antaño.

La Eurozona, por su parte, sufre una clara desaceleración, afectada por la pérdida de impulso de Alemania, por la falta de reformas en países como Italia o Francia o por el proceso de desapalancamiento que todavía está en marcha en el continente. El fantasma de la deflación amenaza desde hace meses la recuperación económica, y ha obligado al BCE a adoptar una política monetaria muy expansiva, que incluye la reciente aprobación de un programa de compra de deuda pública por importe superior al billón de euros. Estas medidas extraordinarias deberían ayudar a reactivar la economía de la zona a incentivar el consumo y la inversión y a hacer más competitivas las exportaciones de las empresas europeas.

España, que será una de las grandes beneficiarias de este plan, ha sido en 2014 la nota positiva de la Eurozona. El PIB español ha crecido en los últimos trimestres a mayor ritmo que el de nuestros vecinos europeos. Los principales indicadores macroeconómicos han tenido una evolución positiva: la balanza de pagos ha tenido un buen comportamiento gracias al aumento de las exportaciones y al abaratamiento del petróleo; se ha rebajado el déficit público; el consumo y la inversión, especialmente en bienes de equipo, se ha reactivado… Y lo que es más importante, el mercado laboral se está recuperando, como lo reflejan las 417.000 nuevas altas en la Seguridad Social registradas en 2014.

Este contexto que debería ayudar a reactivar la demanda de crédito, y a que bajen la morosidad y las provisiones, favorecerá la rentabilidad de los bancos.

Por el contrario los bajos tipos de interés y la fuerte competencia presionarán a la baja el margen de las entidades.

¿Qué expectativas tienen para la evolución de la economía en 2015? ¿Podemos hablar ya de una recuperación en firme?

Después de cinco trimestres consecutivos de crecimiento y seis de descenso en la tasa de paro, podemos afirmar que la economía española ha dejado atrás la recesión. Hay razones suficientes para mirar el futuro próximo con optimismo y confío en que el PIB español crezca en 2015 más del 2%, en línea con lo previsiones de las principales instituciones y firmas de análisis. La española es, junto a Estados Unidos, la única gran economía que ha visto mejoradas sus perspectivas por parte del FMI.

Estamos recogiendo los frutos de las reformas estructurales (aunque hay que seguir profundizando en las mismas), del saneamiento del sector financiero y de los dolorosos esfuerzos realizados por empresas y familias para ganar competitividad y corregir los graves desequilibrios del pasado. Por si no fuera suficiente, nos hemos encontrado con unos aliados inesperados como son la drástica bajada en el precio del petróleo; el plan de estímulo del BCE que ha situado los costes de financiación en niveles nunca vistos; o la depreciación del euro, que contribuye a impulsar las exportaciones fuera de la eurozona. Las perspectivas son francamente positivas aunque existen algunas incertidumbres, como consecuencia del abultado endeudamiento del sector público y privado, de la elevada tasa de paro o de los problemas que están sufriendo las grandes economías europeas y emergentes.

¿Cuáles considera que han sido los hitos más importantes del ejercicio 2014 para los accionistas de Bankinter?

En primer lugar me gustaría destacar el sobresaliente resultado que ha obtenido Bankinter en las pruebas de esfuerzo a las que el BCE y la Autoridad Bancaria han sometido a los Bancos de la Unión Europea con activos superiores a 30.000 millones de euros.

Es la primera vez que se hace un análisis de este tipo, riguroso y exhaustivo, para toda la banca europea en su conjunto y supone el punto de partida para la proyectada Unión Bancaria.

En el escenario más adverso de este ejercicio (que supone una caída del PIB español del 1% en 2015 y una tasa de paro del 27´1% en 2016, es decir algo muy improbable) Bankinter contaría al final del periodo con un ratio de capital CET 1 del 10`99%, que es el doble del mínimo exigido 5`5%, por los reguladores para superar dichas pruebas. Se trata de la mejor nota obtenida entre los bancos cotizados españoles y nos sitúa entre las entidades más solventes de Europa.

En el denominado AQR (Asset Quality Review), paso previo del ejercicio anterior, Bankinter ha sido una de las pocas entidades que no ha tenido que realizar provisiones adicionales con cargo a los resultados de 2014.

Nuestra solvencia ha sido también ratificada por las Agencias de Rating. Standard and Poor’s nos ha subido el rating en dos ocasiones a lo largo de 2014 (algo verdaderamente excepcional) lo que nos ha permitido recuperar la condición de ‘investment grade’.

Naturalmente estos hechos tienen su reflejo en el mercado y en la capacidad de financiación de Bankinter.

El pasado 27 de Enero emitimos 1000 millones de cédulas hipotecarias, a un plazo largo (10 años), con fuerte sobredemanda y a una TIR del 1,1%, 34 puntos básicos por debajo del interés del bono español al mismo plazo en esa fecha.

Lo segundo, aunque no menos importante, que quisiera destacar es nuestra cuenta de resultados.

Los resultados de 2014 son los mejores de la historia de Bankinter. Es cierto que en 2007 el BDI fue cuantitativamente mayor, pero aquél años contamos con un importantísimo resultado extraordinario fruto de la venta del 50% de nuestra compañía de Seguros de Vida.

Lo más importante de los resultados de 2014 es su calidad. Los comentará con detalle la Consejera Delegada, pero a mí me gustaría destacar que no hay extraordinarios de ningún tipo, que el ROF es muy moderado y sostenible, que se consiguen en su inmensa mayoría con la actividad de clientes y que nuestra cartera ALCO ha sido de promedio durante el año inferior a los 5000 millones de Euros, es decir algo mayor que nuestros recursos propios, que es lo que técnicamente se recomienda para cubrir el riesgo de tipo de interés. Es una cartera de un tamaño muy parecido a la que teníamos en los años anteriores a la crisis.

La calidad de los resultados y el vigoroso crecimiento de la actividad de clientes y de todas las líneas de ingresos, así como el entorno económico español más favorable que sugiere un menor coste de la mora para 2015, hace muy probable que en el presente ejercicio los resultados de Bankinter se incrementen de nuevo significativamente.

Otro signo de la buena marcha de la entidad es el hecho de que en el presente ejercicio hayamos aumentado la plantilla del banco en 97 personas en términos netos, que es un crecimiento del un 2’37% . 

El tercer hito a destacar es nuestra evolución en Bolsa durante 2014. Como consecuencia de todo lo anterior ha sido muy favorable. Hemos tenido una revalorización superior al 30%. Si en 2013 fuimos el mejor valor bancario de los 49 que incluye el índice europeo Eurostoxx 600, este años hemos sido los segundos de Europa y de nuevo los mejores del sector crediticio español en el IBEX 35.

Evidentemente el mercado está reconociendo la buena marcha del Banco.

Por último quisiera hablar del dividendo. En el primer trimestre el Banco de España nos eximió del límite que con carácter general había impuesto a la Banca española del 25% en efectivo sobre el beneficio neto del periodo y nos permitió alcanzar el 33,6%, en razón a nuestra solvencia y fortaleza de negocio.

Este porcentaje es el que hemos venido pagando (en efectivo como es costumbre de la casa) en los sucesivos dividendos a cuenta que hemos satisfecho durante 2014.

Los límites establecidos por el Banco de España a la distribución de dividendos dejan de estar en vigor a raíz de la aprobación por parte del Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo de su recomendación ECB/2015/2 relativa a la distribución de dividendos de las entidades de crédito. Bankinter satisface todos los
requerimientos de capital aplicables contenidos en la citada recomendación y se clasifica dentro de la categoría 1 de entidades.

En consecuencia, el Consejo de Administración propone a la Junta General la distribución del 50% de los resultados del ejercicio en forma de dividendo en efectivo, pues considera que ésta es una política prudente que contribuye a la conservación de capital y permite a la entidad mantener un adecuado nivel de solvencia incluso en escenarios económicos adversos tal y como se ha demostrado en los recientes ejercicios de estrés. El dividendo complementario propuesto asciende a 69 millones de euros con lo que se alcanza un pay-out en el ejercicio 2014 del 50%.

Este año Bankinter cumple 50 años. ¿ Cuáles son las principales diferencias de negocio de la banca actual con el de hace 50 años?

Hace 50 años el sistema bancario español era algo radicalmente distinto. El sector estaba muy atomizado, con muchas entidades (más de 200), en general muy pequeñas y de muy diversa condición (bancos comerciales, industriales, regionales, locales, cajas de Ahorros, Cooperativas de Crédito, Cajas Rurales, Banca Oficial, etc). Además la competencia era escasa al estar regulados los precios, el nivel tecnológico y financiero muy bajo y el contacto con el mundo exterior casi inexistente.

Hoy, 50 años después, tras muchísimas vicisitudes, pasando por el proceso de consolidación de los años 80 y 90, y sobre todo por la reciente y terrible crisis financiera el panorama es completamente distinto.

Quedan muy pocas entidades, apenas una veintena de jugadores relevantes, todos muy grandes y dos de ellos con fuerte presencia internacional. El mercado es muy avanzado tecnológica, operativa y financieramente en lo que a Banca Comercial se refiere y existe una fortísima competencia. Una vez completado el rescate bancario, las entidades supervivientes son sólidas y están bien capitalizadas aunque en general siguen inmersas en intensos procesos de reestructuración, que no es el caso de Bankinter.

La tecnología ha cambiado mucho la forma de hacer Banca. Banca telefónica, internet, banca por el móvil, etc han cobrado gran importancia y en el caso de Bankinter nos ha permitido sacar ventaja pues como es sabido hemos estado siempre en primera fila en lo que a innovación se refiere.

Además en los tiempos que corren se están produciendo cambios de mucho mayor calado a los que tenemos que hacer frente. El auge de las redes sociales, la sofisticación y extensión de los dispositivos móviles, el boom del big data, así como la llegada de nuevos actores a través de la implicación de las empresas tecnológicas en el sistema de pagos, los fenómenos conocidos como “Crowd Funding” o “direct lending” están revolucionando el negocio bancario.

Pero también permanecen los principios básicos de nuestra actividad. La confianza sigue siendo la materia prima con la que trabajamos y ello nos lleva al deber de realizar de manera escrupulosa, con rigor, ética y responsabilidad la actividad bancaria, gestionando eficientemente los recursos para ser capaces de incentivar el crédito que es nuestro objetivo final. Pero haciéndolo siempre de una forma responsable y prudente, sin olvidar que somos meros gestores de los recursos que nos confían nuestros clientes y accionistas.

¿Qué valoración hace de la actividad del banco en materia de Sostenibilidad en 2014?

Muy positiva. Los inversores, los empleados, nuestros clientes y proveedores o los miembros del tercer sector ven en Bankinter un banco íntegro y con valores.

Nuestro compromiso con los distintos grupos de interés se articula a través de dos vías.

Una es una avanzada y exigente política de Gobierno Corporativo que hace que cumplamos todas las recomendaciones del Código de Buenas Prácticas

La otra es nuestro Plan de Sostenibilidad, denominado ‘Tres en Raya’ que tiene como objetivo alinear el negocio con la gestión de las tres dimensiones empresariales: la económica, la social y la medioambiental.

Dentro de este plan que ha cumplido su tercer año, se han llevado a cabo numerosas iniciativas dirigidas a hacer de Bankinter un banco en cuyo modelo de gestión se integran los aspectos sociales y ambientales viculados a su actividad. Así lo avala nuestra inclusión un año más en el el Carbon Disclosure Project y en el índice de sostenibilidad FTSE4Good, que nos reconoce como una de las firmas internacionales con mejor comportamiento en cuestiones ambientales, sociales y de gobernanza.

Aunque de todas estas acciones se da cumplida referencia en la información sobre Sostenibilidad que ha sido puesta a disposición de todos los accionistas, me gustaría destacar alguna de ellas.

Por ejemplo el programa ‘Implicados y Solidarios’, que se va consolidando, después de tres ediciones, como un referente en el Tercer Sector; o el proyecto ‘Adaptative’, que inició su andadura en verano y a través del cual el banco ha puesto a disposición del Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo los más avanzados dispositivos tecnológicos en materia de formación a distancia y adaptación a las nuevas tecnologías de personas con lesión medular. También mencionar que en 2014 nos hemos incorporado al plan Nacional de Educación Financiera de la AEB, desarrollando una innovadora metodología didáctica para formar financieramente a escolares de primaria a través de un videojuego. Más de 900 alumnos de cuatro colegios de Madrid han asistido a este curso, que se extenderá este año a una docena de centros más.

¿Y qué proyectos destacaría este año de la Fundación Innovación Bankinter?

El año 2014 será recordado como el del lanzamiento de Cre100do.es, un programa quinquenal con el que la Fundación, junto al ICEX y el Círculo de Empresarios, persigue que un centenar de empresas españolas, con una facturación de entre 25 y 250 millones de euros, se conviertan en grandes empresas es decir que facturen alrededor de los 1.000 millones). A finales de noviembre presentamos la lista con los nombres de las primeras 15 compañías elegidas.

Cre100do.es nace de la necesidad imperiosa de que la economía española cuente con empresas de mayor tamaño.

Si nuestras mejores empresas de tamaño medio se transformaran en grandes, de acuerdo con el estándar señalado, la productividad agregada de la economía española crecería entre el 10 y el 15% y se crearían cerca de medio millón de puestos de trabajo directos, solo por esta causa.

Pero para que haya grandes empresas es condición sine qua non contar también con un ecosistema que impulse el surgimiento de una nueva generación de empresarios. Ese es el objetivo del programa Emprendedores. En el primer año y medio de vida del programa, la Fundación ha analizado más de 850 proyectos empresariales diferentes y el Banco ha invertido en una decena de ellos, erigiéndose como uno de los inversores de referencia en etapas tempranas.

Estas iniciativas, junto al resto de programas de la Fundación (FTF y Akademia), gozan de un enorme prestigio que transciende nuestras fronteras. Así lo constata el hecho de que la prestigiosa Universidad de Pennsylvania que ha analizado casi 7000 Think Tanks de todos los países haya designado a la Fundación de nuevo como el mejor think tank de España y uno de los 30 principales del mundo (el número 26 concretamente) en materia de ciencia y tecnología.

Por todo ello seguimos teniendo en la Fundación un emblema del ADN del banco: La Innovación.

¿Qué balance hace a nivel macroeconómico de 2014?

La coyuntura económica en España en 2014 ha sido mucho más favorable que en ejercicios anteriores.

A nivel internacional sin embargo, el panorama ha sido heterogéneo.

La economía norteamericana ha crecido por tercer año consecutivo por encima del 2% y ha recuperado el nivel de empleo perdido durante la crisis, constituyéndose en el principal motor de la economía mundial.

La situación ha sido bien diferente en los países emergentes que, salvo excepciones positivas como la India, han afrontado un año muy convulso como consecuencia de importantes desequilibrios internos, elevados déficit fiscales, de la depreciación de sus divisas y sobre todo de la drástica caída de los precios de las materias primas. Incluso la propia China no muestra el vigor de antaño.

La Eurozona, por su parte, sufre una clara desaceleración, afectada por la pérdida de impulso de Alemania, por la falta de reformas en países como Italia o Francia o por el proceso de desapalancamiento que todavía está en marcha en el continente. El fantasma de la deflación amenaza desde hace meses la recuperación económica, y ha obligado al BCE a adoptar una política monetaria muy expansiva, que incluye la reciente aprobación de un programa de compra de deuda pública por importe superior al billón de euros. Estas medidas extraordinarias deberían ayudar a reactivar la economía de la zona a incentivar el consumo y la inversión y a hacer más competitivas las exportaciones de las empresas europeas.

España, que será una de las grandes beneficiarias de este plan, ha sido en 2014 la nota positiva de la Eurozona. El PIB español ha crecido en los últimos trimestres a mayor ritmo que el de nuestros vecinos europeos. Los principales indicadores macroeconómicos han tenido una evolución positiva: la balanza de pagos ha tenido un buen comportamiento gracias al aumento de las exportaciones y al abaratamiento del petróleo; se ha rebajado el déficit público; el consumo y la inversión, especialmente en bienes de equipo, se ha reactivado… Y lo que es más importante, el mercado laboral se está recuperando, como lo reflejan las 417.000 nuevas altas en la Seguridad Social registradas en 2014.

Este contexto que debería ayudar a reactivar la demanda de crédito, y a que bajen la morosidad y las provisiones, favorecerá la rentabilidad de los bancos.

Por el contrario los bajos tipos de interés y la fuerte competencia presionarán a la baja el margen de las entidades.

¿Qué expectativas tienen para la evolución de la economía en 2015? ¿Podemos hablar ya de una recuperación en firme?

Después de cinco trimestres consecutivos de crecimiento y seis de descenso en la tasa de paro, podemos afirmar que la economía española ha dejado atrás la recesión. Hay razones suficientes para mirar el futuro próximo con optimismo y confío en que el PIB español crezca en 2015 más del 2%, en línea con lo previsiones de las principales instituciones y firmas de análisis. La española es, junto a Estados Unidos, la única gran economía que ha visto mejoradas sus perspectivas por parte del FMI.

Estamos recogiendo los frutos de las reformas estructurales (aunque hay que seguir profundizando en las mismas), del saneamiento del sector financiero y de los dolorosos esfuerzos realizados por empresas y familias para ganar competitividad y corregir los graves desequilibrios del pasado. Por si no fuera suficiente, nos hemos encontrado con unos aliados inesperados como son la drástica bajada en el precio del petróleo; el plan de estímulo del BCE que ha situado los costes de financiación en niveles nunca vistos; o la depreciación del euro, que contribuye a impulsar las exportaciones fuera de la eurozona. Las perspectivas son francamente positivas aunque existen algunas incertidumbres, como consecuencia del abultado endeudamiento del sector público y privado, de la elevada tasa de paro o de los problemas que están sufriendo las grandes economías europeas y emergentes.

¿Cuáles considera que han sido los hitos más importantes del ejercicio 2014 para los accionistas de Bankinter?

En primer lugar me gustaría destacar el sobresaliente resultado que ha obtenido Bankinter en las pruebas de esfuerzo a las que el BCE y la Autoridad Bancaria han sometido a los Bancos de la Unión Europea con activos superiores a 30.000 millones de euros.

Es la primera vez que se hace un análisis de este tipo, riguroso y exhaustivo, para toda la banca europea en su conjunto y supone el punto de partida para la proyectada Unión Bancaria.

En el escenario más adverso de este ejercicio (que supone una caída del PIB español del 1% en 2015 y una tasa de paro del 27´1% en 2016, es decir algo muy improbable) Bankinter contaría al final del periodo con un ratio de capital CET 1 del 10`99%, que es el doble del mínimo exigido 5`5%, por los reguladores para superar dichas pruebas. Se trata de la mejor nota obtenida entre los bancos cotizados españoles y nos sitúa entre las entidades más solventes de Europa.

En el denominado AQR (Asset Quality Review), paso previo del ejercicio anterior, Bankinter ha sido una de las pocas entidades que no ha tenido que realizar provisiones adicionales con cargo a los resultados de 2014.

Nuestra solvencia ha sido también ratificada por las Agencias de Rating. Standard and Poor’s nos ha subido el rating en dos ocasiones a lo largo de 2014 (algo verdaderamente excepcional) lo que nos ha permitido recuperar la condición de ‘investment grade’.

Naturalmente estos hechos tienen su reflejo en el mercado y en la capacidad de financiación de Bankinter.

El pasado 27 de Enero emitimos 1000 millones de cédulas hipotecarias, a un plazo largo (10 años), con fuerte sobredemanda y a una TIR del 1,1%, 34 puntos básicos por debajo del interés del bono español al mismo plazo en esa fecha.

Lo segundo, aunque no menos importante, que quisiera destacar es nuestra cuenta de resultados.

Los resultados de 2014 son los mejores de la historia de Bankinter. Es cierto que en 2007 el BDI fue cuantitativamente mayor, pero aquél años contamos con un importantísimo resultado extraordinario fruto de la venta del 50% de nuestra compañía de Seguros de Vida.

Lo más importante de los resultados de 2014 es su calidad. Los comentará con detalle la Consejera Delegada, pero a mí me gustaría destacar que no hay extraordinarios de ningún tipo, que el ROF es muy moderado y sostenible, que se consiguen en su inmensa mayoría con la actividad de clientes y que nuestra cartera ALCO ha sido de promedio durante el año inferior a los 5000 millones de Euros, es decir algo mayor que nuestros recursos propios, que es lo que técnicamente se recomienda para cubrir el riesgo de tipo de interés. Es una cartera de un tamaño muy parecido a la que teníamos en los años anteriores a la crisis.

La calidad de los resultados y el vigoroso crecimiento de la actividad de clientes y de todas las líneas de ingresos, así como el entorno económico español más favorable que sugiere un menor coste de la mora para 2015, hace muy probable que en el presente ejercicio los resultados de Bankinter se incrementen de nuevo significativamente.

Otro signo de la buena marcha de la entidad es el hecho de que en el presente ejercicio hayamos aumentado la plantilla del banco en 97 personas en términos netos, que es un crecimiento del un 2’37% . 

El tercer hito a destacar es nuestra evolución en Bolsa durante 2014. Como consecuencia de todo lo anterior ha sido muy favorable. Hemos tenido una revalorización superior al 30%. Si en 2013 fuimos el mejor valor bancario de los 49 que incluye el índice europeo Eurostoxx 600, este años hemos sido los segundos de Europa y de nuevo los mejores del sector crediticio español en el IBEX 35.

Evidentemente el mercado está reconociendo la buena marcha del Banco.

Por último quisiera hablar del dividendo. En el primer trimestre el Banco de España nos eximió del límite que con carácter general había impuesto a la Banca española del 25% en efectivo sobre el beneficio neto del periodo y nos permitió alcanzar el 33,6%, en razón a nuestra solvencia y fortaleza de negocio.

Este porcentaje es el que hemos venido pagando (en efectivo como es costumbre de la casa) en los sucesivos dividendos a cuenta que hemos satisfecho durante 2014.

Los límites establecidos por el Banco de España a la distribución de dividendos dejan de estar en vigor a raíz de la aprobación por parte del Consejo de Gobierno del Banco Central Europeo de su recomendación ECB/2015/2 relativa a la distribución de dividendos de las entidades de crédito. Bankinter satisface todos los
requerimientos de capital aplicables contenidos en la citada recomendación y se clasifica dentro de la categoría 1 de entidades.

En consecuencia, el Consejo de Administración propone a la Junta General la distribución del 50% de los resultados del ejercicio en forma de dividendo en efectivo, pues considera que ésta es una política prudente que contribuye a la conservación de capital y permite a la entidad mantener un adecuado nivel de solvencia incluso en escenarios económicos adversos tal y como se ha demostrado en los recientes ejercicios de estrés. El dividendo complementario propuesto asciende a 69 millones de euros con lo que se alcanza un pay-out en el ejercicio 2014 del 50%.

Este año Bankinter cumple 50 años. ¿ Cuáles son las principales diferencias de negocio de la banca actual con el de hace 50 años?

Hace 50 años el sistema bancario español era algo radicalmente distinto. El sector estaba muy atomizado, con muchas entidades (más de 200), en general muy pequeñas y de muy diversa condición (bancos comerciales, industriales, regionales, locales, cajas de Ahorros, Cooperativas de Crédito, Cajas Rurales, Banca Oficial, etc). Además la competencia era escasa al estar regulados los precios, el nivel tecnológico y financiero muy bajo y el contacto con el mundo exterior casi inexistente.

Hoy, 50 años después, tras muchísimas vicisitudes, pasando por el proceso de consolidación de los años 80 y 90, y sobre todo por la reciente y terrible crisis financiera el panorama es completamente distinto.

Quedan muy pocas entidades, apenas una veintena de jugadores relevantes, todos muy grandes y dos de ellos con fuerte presencia internacional. El mercado es muy avanzado tecnológica, operativa y financieramente en lo que a Banca Comercial se refiere y existe una fortísima competencia. Una vez completado el rescate bancario, las entidades supervivientes son sólidas y están bien capitalizadas aunque en general siguen inmersas en intensos procesos de reestructuración, que no es el caso de Bankinter.

La tecnología ha cambiado mucho la forma de hacer Banca. Banca telefónica, internet, banca por el móvil, etc han cobrado gran importancia y en el caso de Bankinter nos ha permitido sacar ventaja pues como es sabido hemos estado siempre en primera fila en lo que a innovación se refiere.

Además en los tiempos que corren se están produciendo cambios de mucho mayor calado a los que tenemos que hacer frente. El auge de las redes sociales, la sofisticación y extensión de los dispositivos móviles, el boom del big data, así como la llegada de nuevos actores a través de la implicación de las empresas tecnológicas en el sistema de pagos, los fenómenos conocidos como “Crowd Funding” o “direct lending” están revolucionando el negocio bancario.

Pero también permanecen los principios básicos de nuestra actividad. La confianza sigue siendo la materia prima con la que trabajamos y ello nos lleva al deber de realizar de manera escrupulosa, con rigor, ética y responsabilidad la actividad bancaria, gestionando eficientemente los recursos para ser capaces de incentivar el crédito que es nuestro objetivo final. Pero haciéndolo siempre de una forma responsable y prudente, sin olvidar que somos meros gestores de los recursos que nos confían nuestros clientes y accionistas.

¿Qué valoración hace de la actividad del banco en materia de Sostenibilidad en 2014?

Muy positiva. Los inversores, los empleados, nuestros clientes y proveedores o los miembros del tercer sector ven en Bankinter un banco íntegro y con valores.

Nuestro compromiso con los distintos grupos de interés se articula a través de dos vías.

Una es una avanzada y exigente política de Gobierno Corporativo que hace que cumplamos todas las recomendaciones del Código de Buenas Prácticas

La otra es nuestro Plan de Sostenibilidad, denominado ‘Tres en Raya’ que tiene como objetivo alinear el negocio con la gestión de las tres dimensiones empresariales: la económica, la social y la medioambiental.

Dentro de este plan que ha cumplido su tercer año, se han llevado a cabo numerosas iniciativas dirigidas a hacer de Bankinter un banco en cuyo modelo de gestión se integran los aspectos sociales y ambientales viculados a su actividad. Así lo avala nuestra inclusión un año más en el el Carbon Disclosure Project y en el índice de sostenibilidad FTSE4Good, que nos reconoce como una de las firmas internacionales con mejor comportamiento en cuestiones ambientales, sociales y de gobernanza.

Aunque de todas estas acciones se da cumplida referencia en la información sobre Sostenibilidad que ha sido puesta a disposición de todos los accionistas, me gustaría destacar alguna de ellas.

Por ejemplo el programa ‘Implicados y Solidarios’, que se va consolidando, después de tres ediciones, como un referente en el Tercer Sector; o el proyecto ‘Adaptative’, que inició su andadura en verano y a través del cual el banco ha puesto a disposición del Hospital Nacional de Parapléjicos de Toledo los más avanzados dispositivos tecnológicos en materia de formación a distancia y adaptación a las nuevas tecnologías de personas con lesión medular. También mencionar que en 2014 nos hemos incorporado al plan Nacional de Educación Financiera de la AEB, desarrollando una innovadora metodología didáctica para formar financieramente a escolares de primaria a través de un videojuego. Más de 900 alumnos de cuatro colegios de Madrid han asistido a este curso, que se extenderá este año a una docena de centros más.

¿Y qué proyectos destacaría este año de la Fundación Innovación Bankinter?

El año 2014 será recordado como el del lanzamiento de Cre100do.es, un programa quinquenal con el que la Fundación, junto al ICEX y el Círculo de Empresarios, persigue que un centenar de empresas españolas, con una facturación de entre 25 y 250 millones de euros, se conviertan en grandes empresas es decir que facturen alrededor de los 1.000 millones). A finales de noviembre presentamos la lista con los nombres de las primeras 15 compañías elegidas.

Cre100do.es nace de la necesidad imperiosa de que la economía española cuente con empresas de mayor tamaño.

Si nuestras mejores empresas de tamaño medio se transformaran en grandes, de acuerdo con el estándar señalado, la productividad agregada de la economía española crecería entre el 10 y el 15% y se crearían cerca de medio millón de puestos de trabajo directos, solo por esta causa.

Pero para que haya grandes empresas es condición sine qua non contar también con un ecosistema que impulse el surgimiento de una nueva generación de empresarios. Ese es el objetivo del programa Emprendedores. En el primer año y medio de vida del programa, la Fundación ha analizado más de 850 proyectos empresariales diferentes y el Banco ha invertido en una decena de ellos, erigiéndose como uno de los inversores de referencia en etapas tempranas.

Estas iniciativas, junto al resto de programas de la Fundación (FTF y Akademia), gozan de un enorme prestigio que transciende nuestras fronteras. Así lo constata el hecho de que la prestigiosa Universidad de Pennsylvania que ha analizado casi 7000 Think Tanks de todos los países haya designado a la Fundación de nuevo como el mejor think tank de España y uno de los 30 principales del mundo (el número 26 concretamente) en materia de ciencia y tecnología.

Por todo ello seguimos teniendo en la Fundación un emblema del ADN del banco: La Innovación.